OHace ya mucho tiempo, cuando nuestro Colegio recién iniciaba su camino en primaria, una pareja de personas ancianas, que había compartido su vida, y sus paseos en esta hermosa cachila, decidió, que el mejor destino para ella era pertenecer a los niños del Colegio, estar habitada siempre por risas y sueños de niños.
Desde ese momento hemos tomado con todo nuestro afecto la tarea que nos han confiado, año a año la cachila les da a los niños alegría, y disfrute, y en cada ciclo va renovandose con nuevos colores. La cachila tiene una larga historia de paseos por un Montevideo antiguo y romántico, el CEIJA es parte de su historia actual, sabemos que sus dueños originales estarán satisfechos de su destino.
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